Columna publicada en el Periódico Panorama Araucano, edición de mayo de 2014
Considero importante retomar
lo expresado en mi última columna del Diario la Nación, para manifestarle a los
Araucanos que a finales de abril pasado tuvo lugar en Bogotá “la conferencia sobre innovación, educación y desarrollo” con la
presentación de 24 experiencias nacionales como casos de éxito (en los niveles
de primera infancia, básica y media y de educación superior), 7 expertos
internacionales-Japón, Portugal, Canadá, E.E.U.U, Corea del sur, Marruecos- en educación e innovación (Dave Snowden, Jamil
Salmi, Gwang-Jo kim, Manuel Heitor, Frank Bentley, Hideyuki Horii, Ana María
Pardo), 9 patrocinadores- aliados, 3
organizadores (empresarios por la educación, connect Bogotá región y telefónica
fundación) y un grupo diverso de apoyo en innovación y educación, un socio
mediático (periódico el tiempo) y la asistencia
de 620 personas entre rectores, docentes, investigadores, líderes y
empresarios y, en la que curiosamente evidencié, ausencia o representación nula
del departamento de Arauca, incluso de los gobernantes locales, secretarios de
educación y delegados de institutos o universidades presentes en este paraíso
terrenal fronterizo . ¿Con qué argumentos hablamos o impulsamos estos procesos
si no participamos o aprendemos al menos de experiencias nacionales o
internacionales para luego venir y generar una “masa crítica” en el
departamento sobre la materia?. Bueno, el ejemplo está con la elaboración de la
agenda de ciencia, tecnología e innovación en la que se invirtió una suma
considerable de millones y, aún, no se conoce o carece de pedagogía para
apropiarla. En dicho evento se canalizaron 387 retos divididos en 14 categorías
(acceso e inclusión, educación integral, agenda prioritaria, desaprender para
aprender, educar para la paz, empoderamiento de los padres, innovaciones
pedagógicas, integración y continuidad educativa, métricas y evaluación de los
estudiantes, motivación intrínseca, políticas, prioridad por lo nuestro, super
docentes y el uso de la tecnología), los cuales debemos empezar de manera
inmediata y urgente como una prioridad de vida o muerte para la superación de
los problemas sociales y económicos, sustentados en una sociedad altamente
innovadora. De estos retos, se seleccionaron 110 propuestas que se consideraron
como verdaderas joyas a cumplir para lograr la tarea de transformar la sociedad
y se seleccionaron 38 retos en “educar para innovar” y 52 en “innovar para educar” y, otro tanto, en
“educación para el desarrollo”; que constituían los ejes de esta conferencia. También,
los participantes reiteraron conocer el contexto general en el que estamos y en
el que debemos conducirnos con miras a ingresar a la OCDE, las propuestas
generales de las campañas en materia de educación, todas las preguntas
efectuadas en este ejercicio, las recomendaciones de los expertos para que
cumplamos nuestros propósitos educativos, los aceleradores (mecanismos y
elementos que permitan movilizar ágilmente ciertas iniciativas) y, los yunques
(factores o elementos que podrían ralentizar o impedir el desarrollo de ciertos
procesos e iniciativas), aspectos que indudablemente nos dejó un gran
aprendizaje. Lástima que este espacio no permita dar a conocer todo, pero como
recomendaciones quedó que debemos construir una política pública acorde con los
retos actuales fundamentada en el pensamiento analítico, centrado en el
usuario, interactivo y de pensamiento intuitivo (Design thinking), necesario un
diálogo entre las construcciones internacionales con las realidades locales,
poner en marcha el estudio de la fundación compartir que recomienda estrategias
de formación y acompañamiento a docentes
para que innoven con otro tipo de ambientes de formación y de desarrollo
de educadores y agentes educativos capaces de transformar sus prácticas de
aula, además de la formación disciplinar debemos emerger para integrar el
desarrollo de competencias socioemocionales y del siglo XXI, promover la
pertinencia de programas de educación superior, articulación entre evaluación-movilización
y activación social e innovación. Para ello debemos promover el aprendizaje
colaborativo y entre pares; poner la escuela en diálogo con otras experiencias,
reconocerlas y fortalecerlas; los padres de familia como educadores naturales
deben ser involucrados, motivados y movilizados para ser un agente activo del
proceso de aprendizaje; aprender de iniciativas innovadoras que se vienen
realizando en primera infancia para integrar sus aprendizajes a la política
pública; pasar de la transferencia de conocimientos a la construcción colectiva
del mismo; evolucionar de sistemas de conocimiento a redes de conocimiento
global; la experiencia intersectorial y de alianza público-privada constituye
una oportunidad para fortalecer procesos innovadores; más recursos, mejor
inversión y nuevas fuentes de financiación, con la participación del sector
público y privado y a nivel nacional y regional; ver como factor de desarrollo
local las alianzas entre instituciones de educación superior articuladas con escenarios
culturales que promuevan la ciencia y tecnología pudiéndose en distritos de
innovación, los medios de comunicación sumados decididamente a la construcción
de nuevas narrativas en educación e innovación; ver en la movilización
ciudadana por la innovación y la educación una oportunidad para consolidar una
política de estado y; el impulso a mejores didácticas y ambientes de
aprendizaje que potencien las inteligencias múltiples. Sí podemos, sí
innovamos, sí educamos, pero necesitamos aplicar la frase el primer ministro de
Malasia: “Para la mayoría de los países hoy en día, el desarrollo de los
recursos humanos y la formación del capital humano son extremadamente
importantes, absolutamente esenciales, o una cuestión de vida o muerte. En el
caso de Malasia, creemos que es una cuestión de vida o muerte”. ¿Qué hacemos en
Arauca?. ¿Cómo potenciamos una masa crítica en torno a la innovación para la
educación?, o una ¿educación para la innovación?, o mejor, ¿una innovación y
educación para el desarrollo?. ¿Será que podemos?. ¿Pero cuando?, ¿con
quiénes?. Está el reto. Nota. Gracias a los Tameños por su masiva asistencia al
Seminario de política anticorrupción y antitrámite que desarrollamos con la
ESAP el pasado 26 de abril de los corrientes. Se confirma que se requiere una
masa crítica. ( www.obalor.blogspot.com ).