ASESORIA Y CONSULTORIA JURIDICA, EN EDUCACIÓN Y ADMINISTRACIÓN PÚBLICA Y ENTRENADOR EN LIDERAZGO

Abogado, Especializado en Gestión Pública, estudios de Maestría en Administración Pública -ESAP y Maestro en Administración Pública del Instituto Universitario Veracruzano de México, cursante del Doctorado en Ciencias Políticas y Sociales en el Colegio de Morelos (México), ex-Conjuez del tribunal administrativo del Huila. Docente Universitario (del magisterio), investigador y capacitador. Columnista y conferencista en liderazgo, emprendimiento e innovación y derechos humanos. Conciliador en Derecho. Amplia experiencia en el sector educativo, Administración Pública y liderazgo. Experto en gestión de fortalezas. Apasionado de la psicología positiva. No dude en contactarme y efectuar su consulta que de inmediato se dará respuesta oportuna a su llamado o consulta.

UN NUEVO MODELO DE LIDERAZGO

Los nuevos líderes y trabajadores del futuro deben tener una habilidad que pueda venderse al rededor del mundo. Con esa habilidad; construir una marca personal, idea o un producto. También, colaborar con otras personas que son diferentes a nosotros, de ciudades distintas, de otras nacionalidades, de especialidades y géneros no iguales. Si no tenemos clara esa habilidad, seremos rápidamente reemplazados.

miércoles, 19 de agosto de 2015

EL PODER SE HA FRAGMENTADO

Columna publicada hoy en el Diario la Nación www.lanacion.com.co

Reciente, Moisés Naím, escribió el libro: “El Fin del Poder” donde puso de presente la fragmentación del poder como resultado de tres grandes revoluciones- la del más, la de la movilidad y la del cambio de mentalidad- que últimamente han ocurrido en el mundo y, la confrontación entre los gobernantes o los grandes poderes tradicionales entre los múltiples micropoderes surgidos en la sociedad. 

Efectivamente, cuando se trata de analizar en la actualidad la “gestión plural de asuntos”-nueva gobernanza-, las relaciones contractuales o el gobierno como centro de conducción de los problemas públicos; la posición del autor referido, se evidencia perfectamente. Así las cosas, la reestructuración de la economía a escala global es una realidad, la democratización de los regímenes políticos es un hecho, la influencia de una nueva arquitectura internacional por escenarios supranacionales de integración (Unión Europea, Mercosur, etc.) y, la influencia de la legislación internacional en sostenibilidad ambiental, derechos humanos, comercio, entre otros, lo acreditan. También, es evidente la consolidación de escenarios de deliberación política y coordinación de políticas públicas que sigue en crecimiento y expansión así como los movimientos globales de participación, TICs y redes sociales que han revolucionado a la sociedad. Desde otro ángulo, se confirma el crecimiento de la densidad técnica de los problemas en cada Estado que cada día se han  profundizado y la vinculación de los diversos actores y tipos de actores cuya interdependencia e integración tienden a desvanecer la dicotomía público- privada que han incidido en potenciar los postulados sobre críticas a la idea tradicional de gobierno como única fuente de poder para su solución.

Estos acontecimiento, más la interdependencia de otros actores diferentes al gobierno, el policentrismo de los diferentes micropoderes, la incertidumbre que ha tomado ventaja a la racionalidad y, la ficción de un Estado Unificado; constituyen situaciones que han fomentado la aparición de esquemas híbridos, de gobiernos abiertos, más plurales e indirectos para avanzar en formas de gobiernos con más cooperación.

Estas singularidades, pareciera que en el sistema electoral colombiano y, en especial en las regiones, no tuvieran importancia. ¿Qué opinarán nuestros 3328 candidatos que deambulan por estos días en el Huila sobre estos temas?.  Lástima la ausencia de pedagogía electoral en todos los municipios. En realidad, hace falta masa crítica, más pedagogía electoral, instituciones que fomenten y fortalezcan el ejercicio o fiesta democrática. Todo esto, dejará más que fragmentado el poder, no por las razones indicadas, sino por la falta de una ciudadanía empoderada de los problemas públicos y de la utilización de su derecho más preciado a elegir y ser elegido.