EL HUILENSE IDEAL

OBERT ALEJANDRO ORTIZ R.

El Mundo es plano, se derrumbaron los muros y las naciones ganadoras son aquellas que tienen la mayor receptividad a las buenas ideas que vienen de afuera y que poseen la habilidad para combinarlas óptimamente con las buenas tradiciones propias. Se está creando un nuevo escenario donde sólo los hombres y mujeres que verdaderamente piensen y actúen de forma distinta a la tradicional podrán conquistarlo. Si los Huilenses asumen este reto, es indispensable generar el ambiente para tener líderes que posean altas competencias (saber-ser-hacer), capacidad de discernimiento y buenas relaciones sociales.

Además, es necesario que estos líderes tengan hábitos que les permita ser excelentes observadores, disciplinados y con un alto sentido de pertenencia, no solo hacia nuestra cultura, territorio y comunidad, sino también con un alto grado de aceptación y respeto por las normas, con el fin de quedarnos y hacer del Departamento un territorio referente a nivel nacional y global propio de gente pujante y visionaria a partir de todos sus interrogantes resueltos.

Esto implica, una generación de lideres innovadores, inspiradores y transformadores que trabajen con objetivos y metas que conduzcan a producir resultados de impacto, con capacidad de conciliar las diferencias y actuar con justicia, producto de su humildad y tolerancia hacia los demás.

Es ineludible lo difícil que resulta reconocer el talento de las otras personas sin ser egoísta, o trabajar en equipo con espíritu colectivo sin esperar exaltaciones individuales, conservando principios como la transparencia, honestidad, solidaridad, respeto al trabajo y a la opinión diversa; así como saber dar órdenes con autoridad y no con poder. Pero al no modificar estos comportamientos, cada vez, veremos más lejano que el Huila se convierta en una región ganadora porque el liderazgo se delegará a un reducido número de personajes en sus distintos campos.

El reto es que desde nuestro quehacer, fortalezcamos ese liderazgo y el espíritu emprendedor contagiado por la pasión, adaptables al cambio, sin miedo a ser arriesgados, con una creatividad inimaginable, con mayor capacidad de comunicación que de conocimiento y que se considere el fracaso o error sólo como el resultado de una experiencia.

Si logramos el consenso para que el Huila esté dentro de los primeros cinco Departamentos de Colombia en materia de competitividad, es necesario asumir una actitud de cambio ganadora a través de un examen individual de cada una de las características que nos hacen distintos a los ciudadanos de otras regiones y empezar a trabajar para mejorar, con el sello de líderes de excelencia.