En días anteriores se realizó el Foro ‘Pensar en verde, estrategia económica para el siglo XXI’, cuyo Ponente principal fue el Premio Nobel de Paz y Exvicepresidente estadounidense, Al Gore; quien compartió sus tesis y reflexiones sobre la crisis del cambio climático y sus consecuencias.
Las lecciones sobre la solución es que debemos enfocar todas nuestras acciones a la prevención, puesto que se trata de un desafío global, mundial y la respuesta tiene que ser igualmente mundial y global: un acuerdo universal de fijarle precio al carbono (que está destruyendo nuestro futuro), cambiar de actitud y lograr que el Gobierno, Empresarios y Sociedad Civil logren reducir las emisiones. Es decir, impulsar un gran movimiento a favor de las reformas necesarias para cambiar las reglas y que los mercados reflejen esta realidad que tenemos que enfrentar.
Expresó que la atmósfera es muy delgada y se ha convertido en una alcantarilla abierta y, por ello, la cantidad de aire es mínima si se la compara con los noventa millones de toneladas de gases que el mundo emite anualmente. Que habrá sequía en Costa Rica, México, Venezuela y la región norte de Colombia. Que Estados Unidos ya cuentan con paneles solares y Latinoamérica podría contar con un plan intercontinental para usar energía solar y eólica y así reducir emisiones de CO2, y comprender que la energía renovable será la respuesta a este problema y que las herramientas tecnológicas deben manejarse con atención y cuidado.
En este caso, si la riqueza ambiental colombiana se evidencia al ser el segundo país en biodiversidad, primero en especies de aves, segundo en anfibios, tercero en plantas vasculares y uno de los diez más ricos en agua dulce, con 54 parques nacionales de gran importancia para la biodiversidad mundial, sus grandes resguardos indígenas y parques nacionales en la Amazonía que abarcan más del 60% del área cubierta por bosques en la región; esta prevención es mayor y, a su vez, de oportunidad porque al hablar sobre temas ambientales, el resto de países nos mirarán como fuente de esperanza.
Revisemos el informe de Naciones Unidas al designar el 2011 como “Año Internacional de los Bosques” para impulsar la Gestión del Cambio Climático y la Biodiversidad concentrando la importancia y atención a los “Bosques del Mundo”.