SOLO BUENAS INTENCIONES

Una vez aprobados los planes de desarrollo y comenzando hasta ahora su ejecución; es necesario, al menos en este espacio, dar a conocer a los huilenses las buenas intenciones que se anhelan y que se comunican a través de sus  “slogans” para impulsar el desarrollo local en el siguiente cuatrienio.  En su orden tenemos: Trabajamos de corazón por Acevedo, Altamira: Por el rescate de lo nuestro, Agrado Unido construyendo futuro, Aipe: porque todos queremos, trabajamos por ti Algeciras, Todos unidos por Baraya, de corazón por Campoalegre, unidos por una Colombia mejor, Elías: con honestidad y compromiso dejaremos huella, Garzón: lo nuestro es lo social, por un Gigante mejor y para todos, Guadalupe: unidos construyendo futuro, Hobo: unidos hacemos futuro, por un Iquira organizado, comunitario y productivo, unidos por la recuperación de Isnos como debe ser, La Argentina: gestión para el desarrollo, La Plata: unidos por la vía de la prosperidad, Nátaga: unidos trabajando por lo nuestro, Neiva: unidos para mejorar, Oporapa pueblo mío, Palermo por su transformación social, Palestina: por una gestión para todos, Paicol: Unidos ganamos todos, Pital: construyendo sociedad para un mejor futuro, Pitalito: Todos en acción, “con sentido social marcamos la diferencia, Rivera sí”, acuerdo social por San Agustín, Saladoblanco: todos contamos, Santa María: porque todos merecemos vivir mejor, Suaza: Unidos construimos desarrollo, Tarqui: uniendo fuerzas avanzamos, Tello: Todos podemos, Tesalia: Un gerente al servicio de su gente, Teruel productivo con equidad social, unidos por un Timaná mejor, Villavieja: unidos por el cambio, Yaguará: empresa para todos, y la del departamento: haciendo el cambio. Al respecto, sería importante que alguna universidad efectuara un análisis a las metas de los planes de desarrollo del anterior cuatrienio y  el nivel de indicadores logrados en consonancia con slogans planteados (similar a una  evaluación de política pública).  Esto porque las rendiciones de cuentas no están cumpliendo los objetivos y no se están haciendo como deben ser. Igualmente,  que realizarán un análisis a los actuales para conocer la consistencia en su formulación y grado real y posible en las metas a cumplir. También si estos slogans reflejan el perfil del mandatario, equipo o propósitos de la comunidad y sí están articulados con las metas del departamento. Con ello, validaríamos, a manera de ejemplo, si: “un gerente al servicio de la gente” o la “empresa para todos”, será real.

Columna publicada en el Diario la Nación.  www.lanacion.com.co

 

CENTRO DE PENSAMIENTO ESTRATEGICO

Es importante, no dejar pasar inadvertido el contenido del Decreto 1653/12 que creó el Centro de Pensamiento Estratégico como Comité Asesor del Ministerio de Relaciones Exteriores a fin de impulsar talleres, foros, mesas de discusión, capacitación,  formación, publicaciones e información que permita tomar decisiones en materia de política exterior. La importancia de este nuevo Centro de pensamiento, es que valida el impulso de investigaciones en materia de política exterior como apoyo al Ministerio de Relaciones Exteriores, así como el de promover análisis permanentes al entorno internacional con el fin de generar escritos y reflexiones de tipo prospectivo, recomendaciones para la toma de decisiones en materia de política exterior colombiana y el fortalecimiento del Ministerio en la labor de diseño y apoyo a la inserción del país en el sistema internacional. Lo destacable de este comité, es que no será de carácter político sino técnico, pues lo integrarán funcionarios de carrera diplomática y consular, asesores externos, académicos y demás funcionarios del ministerio especializados y expertos en política exterior. Ahora sí, qué mejor que quienes conocen directamente la metamorfosis de la política exterior aporten en temas de ámbito global como; paz y seguridad, cambio climático, crisis económica y del multilaterismo, seguridad humana,  metas del milenio y áreas álgidas sobre migraciones. También en las que Colombia, se juega su prestigio en la comunidad internacional, como son el crimen organizado, narcotráfico y manejo de las drogas ilegales, derechos humanos e internacional humanitario, inserción en la economía mundial, reformas al multilateralismo, medio ambiente y recursos naturales estratégicos, cooperación y el reconocimiento del rol de la sociedad civil en las relaciones internacionales. Desde luego, sin descuidar las dimensiones relevantes para Colombia con relación a sus vecinos, fronteras, Estados Unidos, Unión Europea, Asia-Pacífico, Gran Caribe, Africa y Medio Oriente, rol con organizaciones internacionales frente a temas que conduzcan a  la consolidación de una política exterior de Estado, teniendo como protagonistas actores y dispositivos diplomáticos  con sello de continuidad, integralidad y consensos y no dependientes de orientaciones demagógicas del gobernante de turno. Valiosa oportunidad para quienes integran la cancillería y el servicio exterior de Colombia (misiones, personal y servicio exterior) para que se fortalezcan, apropien su rol, hagan comparaciones internacionales y generen con sus aportes una masa crítica y vigilante sobre esta actividad preponderante de nuestro Estado. Estaremos atentos.

¿HUILA SEGURO Y RESILIENTE?

Somos conscientes que los desastres (catástrofes, terremotos, volcanes, huracanes, inundaciones, deslizamientos, deshielos, contaminación ambiental, derrames tóxicos, incendios, sequías, terrorismo, hambrunas, malnutrición, calentamiento global, desbordamiento de ríos, etc.) ocurridos en el transcurso de la historia de la humanidad han impactado la vida del planeta. Igualmente, que estos, no desaparecerán. Es decir, seguiremos el curso de la vida bajo la exposición, amenaza y vulnerabilidad al riesgo de desastres provocados por la naturaleza o actividad del ser humano. Entonces, si el riesgo es un asunto de vida: ¿cómo se han preparado las universidades, instituciones, ciudades, municipios, departamentos y comunidad en general para enfrentar la gestión integral o reducción del riesgo de desastres- RRD?, ¿son las instituciones seguras y resilientes para encararlos?, ¿se cuenta con normatividad, políticas, estrategias, redes, plataformas, mapas, alianzas publico-privadas, monitoreo, planificación, planes, informes periódicos y conocimiento especializado para que su gestión integral permita la preparación, prevención, mitigación y capacidad de respuesta ante la amenaza y en la RRD?, ¿estaremos preparados para aguantar y sobreponernos (resiliencia) a la ocurrencia de uno de estos riesgos?, ¿Existen programas de formación, investigación, proyección social (currículo ajustado), recursos y compromiso de la alta dirección de las instituciones de educación (Universidades) que contribuyan a la RRD?, ¿tenemos definido nuestro rol como sujetos de prevención y no provocadores del riesgo de desastre en el Huila?, ¿los planes de desarrollo incorporaron como un eje transversal el tema de RRD?, ¿estamos articulados con la oficina de las Naciones Unidas sobre  la RRD en cuanto a cómo debemos prepararnos como ciudades resilientes?, ¿cada institución o empresa tiene sus instalaciones seguras y con programas específicos y contundentes para la protección de la vida y la seguridad de las personas a fin de prevenir y reparar el riesgo y cuando ocurra el desastre, ayudar a superarlo?, ¿existen suficientes programas de difusión sobre la RRD?, ¿contamos con suficientes técnicos, tecnólogos, profesionales, especialistas y doctores expertos en RRD?, ¿todos, incluidos estudiantes, empleados, docentes y administrativos de instituciones de educación y empresas están concienciados sobre estos temas y dispuestos a formar y hacer parte de la red de voluntariado, además de la Defensa Civil, Bomberos, Cruz Roja, etc.?. Al responder, conoceremos que tan seguro y resiliente está el Huila. ¿Quiénes lideran este asunto?.  Estas temáticas, fueron analizadas la semana anterior en un Foro Internacional convocado por Universidades en Panamá.

Columna publicada hoy en el Diario la Nación