Ante la pasividad percibida de los huilenses para defender sus incalculables riquezas, especialmente las que desaparecerán con la construcción del Quimbo, Proyecto Hidroeléctrico no originado por los opitas ni mucho menos por grupos o conglomerados con vocación empresarial pertenecientes a la zona directamente afectada; no queda otra alternativa que pedirle a nuestros 3356 candidatos que están prometiendo lo divino y lo humano para cambiar este departamento, que involucren en sus propuestas: el hecho de que colaborarán para que se realice “el último paseo” de todos los huilenses a los terrenos que serán inundados para que tengamos percepciones y narremos adecuadamente a nuestras futuras generaciones que allí, en las profundidades de estas aguas había una rica biodiversidad de incalculable valor, así como numerosas familias que se afectaron; pero que por la pasividad de su pueblo, a pesar de observar en esos momentos a través de los medios de comunicación cómo en otras latitudes del planeta los ciudadanos se manifestaban en masa para exigir sus derechos y hacer cambiar políticas o modelos -España, Inglaterra y Chile- por mencionar unos ejemplos, incluso, Gobiernos con más de 40 años en el poder en la denominada “primavera árabe”. Pero en el Huila, únicamente un señor con doctorado(Ph.D) que si bien no producía artículos de investigación para revistas indexadas o algo similar a su formación en su universidad, con su vocación ideológica a través de una asociación denominada “plataforma sur” congregó e impulsó el sentimiento de los afectados a unirse y protestar ante todas las instancias y autoridades posibles, sin recibir el apoyo y eco necesario para detener ese monstruo; sencillamente porque no nos despertamos para proteger esta riqueza.
Como están las cosas, propongo a la sociedad huilense que acudamos a todos los gestores de turismo y especialmente a Comfamiliar en cabeza del Doctor Armando Ariza que sí sabe de negocios y hace realidad muchos sueños, que dispongan de unos guías y permisos para que en lo que resta de tiempo, todos y cada uno de los opitas en grupos, hagamos al menos una visita guiada al lugar de los hechos y conozcamos esta geografía que fue y que no defendimos, para que relatemos bien la historia a las siguientes generaciones y éstas sí tengan un referente y puedan defender, si es que les queda, su biodiversidad.
Columna publicada en el dìa de hoy en el Diario la Nación
No hay comentarios:
Publicar un comentario