ASESORIA Y CONSULTORIA JURIDICA, EN EDUCACIÓN Y ADMINISTRACIÓN PÚBLICA Y ENTRENADOR EN LIDERAZGO

Abogado, Especializado en Gestión Pública, estudios de Maestría en Administración Pública -ESAP y Maestro en Administración Pública del Instituto Universitario Veracruzano de México, ex-Conjuez del tribunal administrativo del Huila. Docente Universitario (del magisterio), investigador y capacitador. Columnista y conferencista en liderazgo, emprendimiento e innovación y derechos humanos. Conciliador en Derecho. Amplia experiencia en el sector educativo, Administración Pública y liderazgo. Experto en gestión de fortalezas. Apasionado de la psicología positiva. No dude en contactarme y efectuar su consulta que de inmediato se dará respuesta oportuna a su llamado o consulta.

UN NUEVO MODELO DE LIDERAZGO

Los nuevos líderes y trabajadores del futuro deben tener una habilidad que pueda venderse al rededor del mundo. Con esa habilidad; construir una marca personal, idea o un producto. También, colaborar con otras personas que son diferentes a nosotros, de ciudades distintas, de otras nacionalidades, de especialidades y géneros no iguales. Si no tenemos clara esa habilidad, seremos rápidamente reemplazados.

miércoles, 16 de octubre de 2013

MOVIMIENTO POR LA EDUCACION LIBRE

Miércoles, 16 Octubre 2013 05:07

Después de la semana de receso escolar para estudiantes, pero aprovechada para planificar actividades en lo que resta del año y para dejar al día tareas acumuladas; ojalá la comunidad académica en general, hubiesen visto y trabajado el documental (video) elaborado por expertos en educación de varios países y que circula libremente en la web (youtube) titulado “la educación prohibida” para que a partir de las reflexiones surgidas, se diera inicio en el Huila al gran “movimiento por la educación libre”.

Reto a los politiqueros, entre ellos a quiénes sólo asisten a misa en campaña para esperar el saludo del sacerdote, entregar su sendos afiches y estacionar un bus con fotos de su campaña frente al atrio sin darles el más mínimo atisbo de vergüenza, sino también a todos los docentes y verdaderos políticos, diseñadores y tomadores de decisiones de políticas públicas educativas a que se sumen a este movimiento, pero al de “la educación libre”.

Es necesario repensar la escuela, establecer el grado de importancia de la educación, entender que hay tantas escuelas como realidades sociales, comprender la naturaleza del aprendizaje, reflexionar sobre el proceso histórico de la escuela, identificar si es el sistema el que hace que el estudiante fracase, por qué padres y docentes no escuchan a estudiantes, razón por la que se enseña a competir desde la escuela, revalorar si paradigmáticamente la escuela sigue mal concebida, si son las escuelas espacios de tedio y aburrimiento, por qué en pleno siglo XXI el profesor sigue de dictador de clases y centrado en su contenido, niños escuchando y obedeciendo, la utilidad de lo enseñado parcialmente cuando el conocimiento cambia constantemente, porqué seguimos evaluando de forma estandarizada si cada ser es único e irrepetible, ¿todavía se aprende en la escuela?, ¿es la escuela más bien una guardería o un gran parqueadero de niños o de cárceles en las que cada día se les hace más muros (megacolegios) que aíslan y separan de la realidad? ¿Por qué estudiantes y docentes les da pereza ir a la escuela?

No obstante, queremos una escuela que sea un espacio de crecimiento personal y no un lugar donde se adiestre para la secundaria, universidad, el trabajo y adicionalmente para que, adopten esto, aquello o lo otro, como si fuera una especie de adiestramiento canino. ¿Eso llamamos educación? ¿Me sumo al movimiento?

1 comentario:

Anónimo dijo...

es muy cierto,todo lo que contiene su
columna pero me pregunto si le importara al gobierno establecer una educación libre.

por otro lado seria genial ya que uno de joven termina sus estudios de escuela y bachillerato y no sabe que a ser muchas beses,a si tenga la oportunidad de seguir estudiando si esto se planteara y funcionara la vida de los jóvenes no seria robar ni prostituirse ni ser delincuente.