Se cumplieron dos años de firmados los Acuerdo de paz entre
las FARC y el gobierno del exmandatario de los colombianos, Juan Manuel Santos
Calderón. ¿Y de su balance que sabemos?. En particular, en las regiones (en
este caso el Huila, Caquetá, Putumayo y Tolima), que ha ocurrido?. ¿las
universidades, instituciones y entes territoriales qué parte pueden entregar
sobre el tema?, ¿seguimos esperando que el balance lo entregue el gobierno
nacional?, ¿los habitantes o ciudadanos o ciudadanía qué puede manifestar sobre
el balance de estos dos años?. Cuando se recorre estos territorios en
capacitaciones o formación a la ciudadanía o comunidad por parte de la Escuela
Superior de Administración Pública-ESAP, en especial, en temas de mecanismos de
participación e incidencia, derechos humanos y nuevas ciudadanías, políticas públicas
de derechos humanos, paz territorial, panorama general de los conflictos
armados en el mundo, importancia de la solución política a los conflictos
armados, garantías de seguridad y protección, capacidades para la paz y la
convivencia y, el contexto del cambio que atraviesa Colombia; el mayor reclamo
de quienes acceden a las formaciones impartidas, es que las instituciones de
educación han hecho muy poco al respecto (pedagogía) para que la comunidad
entienda la transición, proceda con creatividad al cambio, se logre
transformación y se den las respectivas capacidades de ese cambio con
inspiración. Qué debido a ello, aún están atrapados en ese miedo por el vacío
de poder que dejaron los grupos armados. Peor aún, que con las llamadas
disidencias o nuevos o diferentes grupos armados ilegales al acecho, ese miedo
ha crecido más. Que esto ha impedido, creerse el cuento de la paz con la firma
de los acuerdos. En un alto porcentaje, los asistentes a los pocos cursos de
formación, coinciden que nunca se han leído los Acuerdos firmados entre el
gobierno y las FARC, que mucho menos conocen la cantidad de normas de carácter
constitucional, legal y reglamentaria surgida a partir de esos Acuerdos. Ni qué
decir, del desconocimiento sobre los diferentes programas, proyectos, acciones,
estrategias adelantadas por lo entes territoriales para la construcción de la
paz territorial, política pública de derechos humanos, etc. Expresan que sólo
escuchan de cantidades de dinero destinados para la paz, pero que en sí, no
tienen conocimiento sobre la inversión específica dada a los mismos. De la
misma forma, que no se han atrevido a generar iniciativas para apropiación de
las capacidades (23) para la construcción de la paz y la convivencia, dado el
miedo generalizado a que los asesinen o a cualquier otra acción que comprometa
su vida o dignidad humana. Tampoco, han tenido acceso a la evaluación o balance
que ha efectuado el instituto Kroc sobre el grado de cumplimiento de los
Acuerdos suscritos el 24 de noviembre de 2016 y que ya va en su segundo
informe. Mejor dicho, que hacer si ya van dos años.
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